19.07.2012 12:16

 

PAPEL. (el papel siempre gana a la piedra)

Agotado el fútbol de la Eurocopa, y después del cansino y manido mitin de la PIEDRA, pasamos directamente al PAPEL. Siete, número más mágico no encontrarás en este blog, poemas de Karmelo Iribarren para alegrarte o amargarte, eso ya es cosa tuya, la mañana y el día completo si se tercia.

Con la colaboración de Jesús, un amigo al que el gustan los astros, practicar el fútbol y mandarme poesías cíclicamente como si el cosmos girase alrededor de Quevedo y el Sol leyese a Cavafis por las mañanas. 

En su blog tienes planteamiento, nudo y desenlace de decenas de poetas. Date una vuelta alrededor del Sol y no te quemarás.

https://tertuliaspoeticas.blogspot.com.es/

Los poemas que vas a leer  (¡No huyas ahora!) están elegidos con el poético método de contar hasta siete, mover el ratón y seleccionar el más cercano. Un método como otro cualquiera y además muy efectivo, al menos para mí, visto el resultado final y el tipo de blog que estás leyendo.

!Ánimo¡  Los poemas son pocos y cobardes, este es, o era, un blog de fútbol (¡Forza Italia!) y le vas a meter un golazo por la escuadra a la poesía...

 

LA EDAD DE LA INCOCENCIA

 

Para Iñaki Aldekoa

 

Ni Raquel Welch,

ni James Dean,

ni Jesucristo crucificado.

Mis sueños los veló Durruti.

Me despertaba

y ahí estaba él,

dándome ánimos:

                             Nosotros

heredaremos la tierra.

 

Claro que yo era aún tan inocente

que ni siquiera

me preguntaba cuándo.

 

 

 

¿QUÉ FUE DE TANTO CAMPESTRE?

 

Haz el amor

y no la guerra,

decían.

 

No te jode,

como si eso

fuese

tan fácil.

 

 

YA ESTÁ

 

Ya poseemos

casi todo

lo que nos iba

a hacer felices.

Puede decirse

que lo hemos

conseguido.

Ya está.

Ahora sólo

nos queda

comprobar

hasta qué punto

fuimos sinceros

con nosotros

mismos.

 

 

 

LO DEMÁS SON HISTORIAS

Para los Legorburu Arzamendi

 

Mi mujer y mi hija,

estas paredes y estos libros,

un puñado de amigos

que me quieren

-y a los que quiero de verdad-,

las olas del cantábrico

en septiembre,

tres bares, cuatro

con el garito de la playa.

Aunque sé que me dejo

algunas cosas, puedo decir

que, de ser algo, ésa es mi patria.

Los demás son historias.

 

 

SEÑOR

 

No es que me moleste

en sí, pero

cuesta acostumbrarse.

Eso de que vayas

por ahí

tranquilamente

y se te acerque

una chavala

y te diga:

“¿Tiene hora, señor?”,

eso de que te saquen

de la pista

con tanta educación,

no es fácil de asumir

 

 

NADA, UN ESPEJISMO

 

Lucía el sol, el aire

estaba limpio,

había descansado

diez horas de un tirón,

el camarero me miró

como si fuese una persona,

el café no me sentó

como un tiro…

Pero

 

¿qué estaba pasando?

                                   Miré

al fondo, y unos tipos

a punto de ser estrangulados

por sus corbatas, de ésos

que mueven kilos

chasqueando los dedos,

con su sola presencia,

se encargaron de poner

las cosas en su sitio.

 

 

LUNES, 8 DE LA MAÑANA: VERDE

 

Ahí los tienes:

se aferran al volante,

endurecen el gesto,

miran hacia el

futuro,

y pisan hasta

el fondo

el acelerador.

Pobres ilusos:

como si pudiesen

escapar

de lo que son.

 

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Golosón, que eres un golosón, mucho fútbol, mucho fútbol, pero has leído los siete poemas sin respirar, pegado a la cal, sin parar, al contraataque, levantando la cabeza, orgulloso, disfrutando la jugada, recortando al contrario, haciendo caños, sombreros y filigranas.

Venga, va, dale, centra, chuta...  

                           ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ Gooooooooooooooooooooooooool !!!!!!!!!!!!!!!!!!!!